Las cargas livianas pueden parecer menos propensas a daños, pero si no se embalan correctamente, pueden sufrir impactos, humedad o aplastamiento durante el traslado. Para evitarlo, sigue estos pasos esenciales.
1. Cajas resistentes y del tamaño adecuado
Elige una caja de cartón corrugado de doble o triple pared si el contenido es delicado. Asegúrate de que la caja sea del tamaño adecuado para evitar que los productos se muevan demasiado dentro.
2. Material de relleno protector
Usa espuma, plástico burbuja o cartón corrugado dentro de la caja para absorber impactos. Esto es clave en artículos como electrónicos, vidrio o cerámica.
3. Cinta adhesiva de alta resistencia
Usa cinta adhesiva ancha y resistente para sellar las cajas. No escatimes en calidad, ya que un mal sellado puede hacer que el paquete se abra durante el transporte.
4. Etiquetas de instrucciones de manejo
Coloca etiquetas visibles con indicaciones como «Frágil», «Este lado arriba» o «No apilar» si el producto lo requiere. Esto evitará manipulaciones inadecuadas.
Un embalaje adecuado protege tu carga liviana y reduce riesgos durante el transporte. Invierte en buenos materiales y sigue estas recomendaciones para garantizar que tu mercancía llegue en perfecto estado.
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